
Disfruten las demas....








El término ingles "luddite" ("Ludita", en español), dentro de un contexto histórico-político, se refiere a un movimiento surgido durante la Revolución Industrial, a finales del siglo 18 y principios del siglo 19. En esos años, la aparición de las máquinas de vapor y el nacimiento de la industria a gran escala, algunos obreros comenzaron a notar que, si bien el progreso tecnológico permitía el aumento de la producción, los únicos que se enriquecían eran los dueños de las fabricas, mientras que sus condiciones de vida permanecían invariables.
Actualmente, a menudo se utiliza el termino "Ludita" para describir a quien considera que las innovaciones científicas son innecesarias, o incluso, perjudiciales para la humanidad.
El Neoludismo es un moderno movimiento de oposición al desarrollo tecnológico en general. Tiene sus raíces en el antiguo movimiento "ludita" nacido hace 200 años, pero en lugar de oponerse a las maquinas de vapor centra sus críticas en las modernas tecnologías.
El calentamiento global es uno de los mayores problemas que tenemos hoy en día. En su mayoría es causado por el uso indiscriminado de derivados del petróleo como combustible. Esto hace que el problema además de ambiental sea práctico: si cuidamos a nuestro planeta, nos quedamos sin energía y por consiguiente sin dinero. Es por esto que a la mayoría de las empresas e incluso naciones más importantes del mundo se niegan a tomar acciones importantes para combatir los problemas ambientales. Cuando no los esconden.
Sin embargo, esto no significa que los científicos de dichas naciones no estén investigando vías de escape alternativas. Y esta iniciativa, que ya han puesto en marcha en 2005 en California, es muy interesante. Se trata de hacer que todos los techos de las nuevas casas sean hechos en materiales que reflejen la luz solar. Así no solo se ahorraría energía en refrigeración, si no que se estaría ayudando a que los rayos del sol vuelvan a salir al espacio, enfriando un poco el planeta. Aún se debería hacer que las calles (que ocupan un 35% de la superficie de las ciudades) también usen materiales reflectantes ya que el alquitrán, además de ser un subproducto del petróleo, absorbe el calor. Sin embargo, parece que van por buen camino.
Se ha estimado que si todas las casas de una ciudad “pintaran sus techos de blanco”, se formaría una especie de mini-escudo solar que haría que la temperatura baje de varios grados y haya menos problemas de smog. Finalmente, también se calculó que si las 100 ciudades más grandes del mundo hicieran sus techos y pavimentos en materiales reflectantes se podría reducir el crecimiento de la temperatura de los últimos 10 años sin tener que hacer ningún cambio en el área industrial.
Esto no significa que podamos seguir indiscriminadamente llenando nuestro aire de basura; aún pensamos que Estados Unidos tendría que firmar el protocolo de Kyoto y su sucesor. Sin embargo, si se toma esta iniciativa relativamente simple en varios lugares del mundo, podríamos hacer un pequeño proceso de “refrescamiento global” y ayudar a nuestro planeta. Así daríamos un poco más de tiempo a los científicos para desarrollar la tecnología necesaria para reemplazar de una vez por todas al petróleo y los emisores de gases contaminantes.
Una de las tantas cosas que ha producido el calentamiento global es el derretimiento de muchos glaciares. A principios de 2008, un informe de la ONU reveló que por el calentamiento global muchos de los glaciares del mundo se estaban derritiendo a una velocidad récord, con mayor énfasis en las zonas europeas. Además, infromaron que durante el período 2005/06, la velocidad fue dos veces más rápida que lo registrado en 2004/05. Finalmente, varios expertos sostuvieron que el acelerado derretimiento de los glaciares podría provocar una crisis en el suministro de agua dulce de quienes dependen del agua derretida de los glaciares para el suministro de agua potable.
Mientras que muchas personas y organizaciones han puesto su granito de arena, existe un aporte en particular que parece estar haciendo el cambio más significante de todos. Chewang Norphel, de 76 años, ya ha creado 12 glaciares nuevos y apunta a crear cinco más antes de morir. Además, para entonces espera poder haber entrenado nuevas personas que se encarguen del mismo labor cuando él ya no esté.
Los glaciares del Himalaya, vierten sus aguas en los ríos más importantes de la zona y alimentan regiones como Tibet, Nepal y el resto del continente indio. Sin embargo, en hechos recientes, se culpa al rápido derretimiento de los glaciares por muchas de las inundaciones que han destruido cosechas y hogares. Por esa razón, Norphel, un viejo ingeniero indio, se ha dedicado a crear nuevos glaciares. ¿Cómo? El ingeniero retirado redirigó agua derretida, mediante una serie de cañerías que desembocan en un lago artificial, que se posa en los valles montañosos. Mientras tanto, una presa mantiene el agua dentro y durante la noche se congela.
Hasta el momento, éstos glaciares han llegado a los 28.317 metros cúbicos de hielo, que pueden irrigar casi 200 hectáreas de tierra. Recientemente su trabajo fue reconocido por el primer ministro de India, Manmohan Singh, quien ha llamado al resto de las naciones de la región (China, Pakistán, Nepal y Bután) para unirse en el esfuerzo. Finalmente, el gobierno indio le ha otorgado US$26.492 para que construya cinco glaciares más. Sin embargo, Norphel sabe que el tiempo es su enemigo, por eso ha pasado su conocimiento a otros, para que sigan su proyecto una vez que él no esté.
El aspecto del engendro no puede ser más inquietante. Parece una fusión aberrante de una maceta con una araña mecánica. Será muy artística pero visualmente produce un cierto rechazo debido a esa extraña mezcolanza de biología y cibernética. Sus doce patas le sirven para desplazarse de modo autónomo en busca de comida, que no es otra que los residuos que contienen los ríos tras los vertidos de muchas fábricas sin conciencia. El robot es la parte que se encarga de desplazar a los organismos que viven en su armadura. Dispone de sistema energético con celdas de combustión microbianas, donde unas bacterias transforman el agua contaminada en energía, para que el robot pueda desplazarse y realizar sus actividades.
“El hábitat natural de este ciberorganismo se encuentra cerca de los ríos contaminados, ya que las aguas residuales le proporcionan los nutrientes, que una vez procesados se convertirán en energía permitiéndole cumplir sus ciclos vitales", explica Esparza. Gracias a una membrana de intercambio proteico, el hidrógeno que se genera durante el proceso entra en contacto con el oxígeno, volviendo a convertirse en agua, esta vez limpia. Gracias a esta tecnología, la “planta nómada” recorre las vertientes de los ríos limpiando sus riberas de podredumbre y contaminación humana, aprovechando la propia capacidad de los organismos biológicos para depurarla y extraer su energía.
Para desplazarse, la planta nómada utiliza un sistema de radar ultrasónico muy similar al empleado por los murciélagos. “Básicamente los sensores envían sonidos que regresan como volúmenes, permitiendo al robot identificar los obstáculos, que son almacenados como memoria espacial en su cerebro dotado de inteligencia artificial", explica el artista. Esto le permite moverse por terrenos abruptos y sortear las dificultades para poder llegar hasta los márgenes de los ríos, donde proyectar su “trompa” y absorber el agua donde se encuentra su ponzoñosa pitanza, que degustará con satisfacción gracias a los efectos de su potente membrana biológica.
Esparza no pretende tanto haber creado un dispositivo realmente eficaz contra la contaminación sino llamar la atención sobre el problema más acuciante del planeta. Es su manera de reclamar a las conciencias que tomen partido por la Tierra y que aprovechen las ventajas de la tecnología para combatir los problemas que ella misma genera. Ni siquiera se trata de un ejercicio de estilo de belleza visual, como suelen hacer otros artistas. El mexicano pretende crear una visión rompedora del problema y tratar de hacer que las cabezas se giren para mirar y luego procesen lo que han visto para tomar posesión de una realidad cada vez más presente y más necesitada de soluciones.
Hay números que han intrigado a la humanidad desde hace siglos. Valores como PI -la razón matemática entre la longitud de una circunferencia y su diámetro- o e -la base de los logaritmos naturales-, suelen aparecer como resultado de las más dispares ecuaciones o en las proporciones de diferentes objetos naturales. El número áureo -a menudo llamado número dorado, razón áurea, razón dorada, media áurea, proporción áurea o divina proporción- también posee muchas propiedades interesantes y aparece, escondido y enigmático, en los sitios más dispares.
El primero en hacer un estudio formal sobre el número áureo fue Euclides, unos tres siglos antes de Cristo, en su obra Los Elementos. Euclides definió su valor diciendo que "una línea recta está dividida en el extremo y su proporcional cuando la línea entera es al segmento mayor como el mayor es al menor." En otras palabras, dos números positivos a y b están en razón áurea si y sólo si (a+b) / a = a / b. El valor de esta relación es un número que, como también demostró Euclides, no puede ser descrito como la razón de dos números enteros (es decir, es irracional y posee infinitos decimales) cuyo su valor aproximado es 1,6180339887498...
Casi 2000 años más tarde, en 1525, Alberto Durero publicó su “Instrucción sobre la medida con regla y compás de figuras planas y sólidas”, en la que describe cómo trazar con regla y compás la espiral basada en la sección áurea, la misma que hoy conocemos como “espiral de Durero”. Unas décadas después, el astrónomo Johannes Kepler desarrolló su modelo del Sistema Solar, explicado en Mysterium Cosmographicum (El Misterio Cósmico). Para tener una idea de la importancia que tenía este número para Kepler, basta con citar un pasaje de esa obra: “La geometría tiene dos grandes tesoros: uno es el teorema de Pitágoras; el otro, la división de una línea entre el extremo y su proporcional. El primero lo podemos comparar a una medida de oro; el segundo lo debemos denominar una joya preciosa”. Es posible que el primero en utilizar el adjetivo áureo, dorado, o de oro, para referirse a este número haya sido el matemático alemán Martin Ohm (hermano del físico Georg Simon Ohm), en 1835. En efecto, en la segunda edición de 1835 de su libro “Die Reine Elementar Matematik” (Las Matemáticas Puras Elementales), Ohm escribe en una nota al pie: “Uno también acostumbra llamar a esta división de una línea arbitraria en dos partes como éstas la sección dorada." El hecho de que no se incluyera esta anotación en su primera edición es un indicio firme de que el término pudo ganar popularidad aproximadamente en el año 1830.
El número áureo también está “emparentado” con la serie de Fibonacci. Si llamamos Fn al enésimo número de Fibonacci y Fn+1 al siguiente, podemos ver que a medida que n se hace más grande, la razón entre Fn+1 y Fn oscila, siendo alternativamente menor y mayor que la razón áurea. Esto lo relaciona de una forma muy especial con la naturaleza, ya que como hemos visto antes, la serie de Fibonacci aparece continuamente en la estructura de los seres vivos. El número áureo, por ejemplo, relaciona la cantidad de abejas macho y abejas hembras que hay en una colmena, o la disposición de los pétalos de las flores. De hecho, el papel que juega el número áureo en la botánica es tan grande que se lo conoce como “Ley de Ludwig”. Quizás uno de los ejemplos más conocidos sea la relación que existe en la distancia entre las espiras del interior espiralado de los caracoles como el nautilus. En realidad, casi todas las espirales que aparecen en la naturaleza, como en el caso del girasol o las piñas de los pinos poseen esta relación áurea, ya que su número generalmente es un término de la sucesión de Fibonacci.
Este número también aparece con mucha frecuencia en el arte y la arquitectura. Por algún motivo, las figuras que están “proporcionadas” según el número áureo nos resultan más agradables. Aunque recientes investigaciones revelan que no hay ninguna prueba que conecte esta proporción con la estética griega, lo cierto es que a lo largo de la historia se ha utilizado para “embellecer” muchas obras. Por ejemplo, el uso de la sección áurea puede encontrarse en las principales obras de Leonardo Da Vinci. Es bien conocido el interés de Leonardo por la las matemáticas del arte y de la naturaleza, y esta proporción no le era indiferente. De hecho, en su estudio de la figura humana, plasmado en el Hombre de Vitruvio, puede verse cómo todas las partes del cuerpo humano guardan relación con la sección áurea. Algunos expertos creen que la gran pintura inacabada de Leonardo, San Jerónimo, que muestra a este santo con un león a sus pies, fue pintada ex profeso de forma que un rectángulo con estas proporciones encajase perfectamente alrededor de la figura central. También el rostro de la Mona Lisa encierra un “rectángulo dorado” perfecto. Obviamente, Leonardo no fue el único en utilizar esta proporción en su obra. Miguel Ángel, por ejemplo, hizo uso del número áureo en la impresionante escultura El David, desde la posición del ombligo con respecto a la altura, hasta la colocación de las articulaciones de los dedos.
La arquitectura no es ajena a este valor matemático. La relación entre las partes, el techo y las columnas del Partenón de Atenas, por ejemplo, también se relacionan mediante el número áureo. Muchos productos de consumo masivo se diseñan siguiendo esta relación, ya que resultan más agradables o cómodos. Las tarjetas de crédito o las cajas de cigarrillos poseen dimensiones que mantienen esta proporción. El número áureo puede encontrarse por todas partes, y a menudo ni siquiera somos consientes de que está allí. Pero en general, cuando algo nos resulta atractivo, esconde entre sus partes esta relación. ¿No es asombroso?
¿Has tenido alguna vez la emocionante experiencia de observar un eclipse? Concordaras que es uno de los fenómenos que mas llaman la atención de la humanidad. Su nombre se deriva del griego ekleipsis, que quiere decir “desaparición” o “abandono”. Sucede cuando la luz procedente de un cuerpo celeste es bloqueada por otro, normalmente llamado cuerpo eclipsante. Normalmente se habla de eclipses solares y lunares y esto ocurre cuando el sol y la luna se alinean con la tierra de una manera determinada.
A continuación te mostraremos 10 datos de los eclipses que quizás no conocías:
1: El eclipse solar más largo del siglo ocurrió el 22 de julio del 2009 sobre India, Nepal, Bhután y China. Alcanzó su punto álgido sobre el Océano Pacífico, pero incluso allí, la oscuridad solo duró 6 minutos y 29 segundos.
2: Las sombras arrojadas por la luna que cruzan la superficie de la Tierra avanzan a una velocidad superior a los 8 mil kilómetros por hora.
3: Justo antes de que el eclipse sea total, aparecen resplandecientes las perlas de baily allá donde la luz del sol brilla a través de los valles de la luna. La última de las perlas crea la impresión de un anillo de diamantes en el cielo.
4: Durante las expediciones para ver eclipses, algunos aficionados a la astronomía acompañan este fenómeno con propuestas matrimoniales.
5: En Júpiter se puede disfrutar de un eclipse triple, en el que tres lunas arrojan sus sombras sobre el planeta simultáneamente. Este evento es fácilmente observable con un telescopio doméstico.
6: La palabra china para eclipse solar es “shih”, que significa “comer”. En la antigua China, tradicionalmente se batían cacerolas y se tocaban tambores para espantar al “perro celestial” que, según creían, estaba devorando al sol.
7: Un eclipse solar total se da una sola vez cada 360 años.
8: El próximo eclipse total de luna (visible en toda Norteamérica) tendrá lugar el 21 de diciembre del 2010.
9: El lugar más afortunado de la Tierra para ver un eclipse es Carbondale, en Illinois (Estados Unidos).
10: Mientras se encontraba varado en Jamaica, el 29 de febrero de 1504, Cristóbal Colón fue salvado por un eclipse lunar: tras un fracaso en las negociaciones con los habitantes locales, Colón les amenazó con que la luna desaparecería si no comenzaban a dar comida a su tripulación.
Estos son tan solo algunos datos sobre los eclipses así que esperamos que la próxima ves que tengas la oportunidad de disfrutar de la vista de alguno de ellos realmente te deleites y recuerdes algunos de estos datos.
que se necesitan para hacer el queso.
Las primeras personas que fabricaron el queso vivieron en el medio Oriente
hace mas de 4.000 años
En sus inicios , la importancia del que si dependia de si era capaz de mantenerse fresco
largo tiempo.
Los quesos se agrupan deacuerdo con su dureza o suavidad.
Sus cuatro tipos principales son ; suave, semisuave, duro y muy duro.
Los mas suaves contienen mas humedad que los otros , pero los mas
duros son los que se conservan mejor.
Hoy dia existen mas de 4.000 tipos de queso en el mundo.
Los huecos que tienen algunos quesos se llaman “ojos” y son burbujas causadas por los gases
que liberan las bacterias que contiene el queso
Aunque el queso desarrolle moho , puede comerse, solo debes quitarle al queso alrederor de 1/2cm de su corteza exteriror.
Los antiguos romanos eran experimentados productores de queso.
Algunas hasta tenian en sus casas cuartos especiales dedicados ala
producción del queso.
Sorprendentemente, el manto helado que cubre el Ártico y que desde el 2007 había descendido a cotas preocupantes, vuelve a sus niveles normales. La comunidad científica culpaba al calentamiento global como causante de la reducción del hielo pero este nuevo dato ha dejado perplejos a los científicos que no terminan de explicarse cómo ha sucedido. El gran corazón blanco late de nuevo.
Los expertos vaticinaban que el hielo del Ártico desaparecía por completo en el año 2015, vista la velocidad con que se perdió el manto helado en el año 2007 y que generó unos datos alarmantes y bastante pesimistas. Según el científico Carlos Duarte, del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (del CSIC y la Universidad de as Islas Baleares) el actual ritmo de calentamiento del Polo Norte (0,4 grados centígrados cada decenio) diluirá el enorme casquete ártico hasta dejarlo del tamaño de un cubito de hielo en unos 5 años. Sin embargo, la naturaleza acaba de darle un vuelco a las expectativas y ha dejado con la boca abierta a los científicos que tenían este suceso tan claro.
Mark Serreze, director del Centro Nacional de Información sobre Hielo y Nieve (NSIDC) en Colorado, Estados Unidos, no ocultaba su asombro por la recuperación de los hielos del Ártico tras el gran descongelamiento de 2007, cuando las capas se redujeron a la menor extensión registrada en siglos. Según los expertos, esto lo ha provocado el fenómeno que llaman “Oscilación del Ártico”, un cambio de vientos polares procedentes del Mar de Bering, cuya presencia ha tenido el efecto de volver a congelar grandes superficies del Polo Norte, dejándolo a niveles similares a los registrados en el 2001. También se culpa de este evento al invierno tan atípico que han tenido en algunos lugares del planeta (Norte de Europa y Este de América del Norte), que han sufrido temperaturas extremadamente bajas.
No entienden por qué este súbito cambio de vientos ni de la magnitud de la congelación que ha devuelto al polo norte su antigua capa de hielo, dejando las estimaciones científicas por los suelos y produciendo una sensación en la comunidad científica de no tener todos los datos controlados. Sin embargo, los expertos afirmaron que, a pesar de la espectacularidad del fenómeno, este hecho tiene poca relevancia para el cambio climático a largo plazo.
Caminó, siempre lo había hecho, siempre le había gustado. Caminó sobre la hierba, sobre cada piedra y saltó cada hoyo y cada rio, recorría el campo con un paso alegre y tranquilo; sin prisa, en realidad llegar no era su meta, para empezar no sabía a donde quería llegar, o siquiera si quería llegar a algún lado. Se sentaba a mirar cada flor, cada línea que le pareciera curiosa y reía con las hormigas que corrían a toda prisa en todas direcciones.
Nació y eso hoy le parecía un regalo, aunque no sabía para qué había nacido, y en general eso no le importaba, alguna vez se sentó largo rato a mirar su cuerpo, movía las piernas como si no fueran suyas, como una cosa que se movía con voluntad propia y le sorprendía sentir cuando se movían, sentir ese movimiento que rosaba el suelo en las piernas y, al mismo tiempo en todo el cuerpo, como su fuera completamente piernas y completamente cuerpo, podía mover cada parte de su ser con agilidad y sin pensarlo y se preguntaba quién le había enseñado a usar su cuerpo. Cómo le habían enseñado y lo que más curiosidad le daba es, cuándo le enseñaron eso.
Hace tanto que había salido a caminar y ahora había juntado una buena colección de nombres con intenciones, recordaba perfectamente cada nombre y lo que había intentado enseñarle ese nombre; recordaba el que le enseñó a caminar, el que le animó a caminar sin rumbo, a quienes le quisieron hacer caminar con rumbo, los que querían hacerle como las hormigas, apuradas, intranquilas.
Algunos nombres tenían caras lindas, otros buenas intenciones y algunos más sabían mucho y unos pocos sabían bien pero de esos nombres hacia mucho que no conocía o que no se dejaban probar.
Hoy hacia mucho sol, mucho de todo en realidad, tenía mucha hambre y había caminado mucho, había mirado mucho y el día había resultado tan muchoso que quería un poco de nada. Jamás había conocido el cansancio y hoy no iba a ser la primera vez, tal vez nunca lo conocería aunque muy seguramente algún nombre intentaría enseñárselo.
Cosa rara lo que los nombres podían enseñar y aun más rara lo que algunos nombres desean enseñar. Es increíble cada nombre, cada intento, cada cosa que intentan nombrar.
Continuará.